lunes, 1 de octubre de 2012

Ana Cembrero, tanto hecho y tanto por hacer


Ana Cembrero Coca nació en Valencia en 1983. Vive y desarrolla su profesión y pasiones en Bruselas, un ejemplo como tantos otros de la emigración de talentos.

Ana es una mujer de danza, de cine, pero sobre todo de mundo. Sus trabajos muestran el talento del trabajo condimentado con el bien vivir. El del pisar firme por lo aprendido y lo estudiado con la seguridad y desparpajo que da saberse mover por la vida, acumular experiencias, absorber sensaciones, mundos, gentes. De todo ello, Ana Cembrero ha extraído un universo que inevitablemente debía expresar, y curiosamente escogió dos mundos paralelos en su caso que hicieran los viajes creativos de ida y vuelta, hacia dentro y hacia fuera, la danza y el cine.

Su currículum en danza no deja indiferente a nadie desde que comenzó a formarse en danza clásica por la Royal Academy of Dance de Londres, para pasar a manos de algunos de los mejores profesionales de la danza contemporánea. Pero más allá de los difíciles y gratificantes caminos de la danza, interesa su puesta en marcha, interesa el momento en que Ana Cembrero comienza a producir, dirigir, realizar, coreografiar... Empieza su andadura creativa, junto a compañías europeas y en solitario.

Es su faceta de creadora en solitario, junto a la compañía inevitable y enriquecedora siempre de su compañero Jorge Piquer de la productora La Ignorancia, la que nos interesa. Con La Ignorancia comienza a desplegar sus recursos, sus deseos, su visión del mundo artístico, su visión del mundo.

Es completa, mucho, y por eso encontramos su nombre en coreografías o dirección y realización de cine, en concreto, videodanza. Este arte le llegó a Ana como revelación, como lugar exquisito en el que encontrarse y conjugar sus visiones coreográficas y cinematográficas. Y estudió, se empapó de la historia del videodanza, probó, pero sobre todo se puso en marcha, no tuvo miedo a nada... y creó.

Gracias a que llegó a ese punto en el que se encontró algún día, de absoluta clarividencia al conjugar dos disciplinas que dominaba, tenemos hoy piezas imprescindibles de la actualidad del cine de danza en Europa: 'Cinética', sobre todo, y VRTTI.

'Cinética' (premiada al mejor cortometraje en 38th Dance on Camera, New York) es pura emoción porque es poesía. Es gusto, el gusto de escoger la belleza que se refuerza con la energía y fuerza pasional, esa que tiene Ana Cembrero y que deposita en todo lo que hace. No es estética pura, no es fácil artificio o ese conformarse con lugares comunes que sabemos que recibirá el público con aplausos, no, es instintiva, delicada, pero fuerte, rítmica, placentera, reflexiva y de acción. La cámara acompaña al espectador porque acompaña al intérprete en coreografías limpias, dinámicas y libres de polvo y paja. La coreografía es sencilla y complicada a la vez, el escenario (Parque Natural del Cabo de Gata-Almería) invade la pantalla y toma protagonismo. Cambia la cámara, rápida, jugando y descubrimos recovecos coreográficos sobre nuevos escenarios que hilados descubren una historia de ficción perfecta.


Trailer Cinética from La ignorancia on Vimeo.

Percibo su valentía reforzada por una música única y excepcional, la valentía de arrancar con proyectos difíciles y de tanta calidad. Parece que Ana no tiene miedo y da la sensación de que haga lo que haga lo hará bien. El secreto está en saber escuchar ese mundo de sensaciones que le rodea. Escucha y observa, se empapa de las esencias que la provocan y dibuja con el cuerpo, la mente o la cámara escenarios bellísimos y sensitivos que parecen verso en prosa, bien narrada y con ritmo poético.

Luego llegó VRTTI, un juego lindo y muy grato, muy puro, muy sencillo y atrevido sobre la condición de ser. Intenso, de nuevo.


Vrtti :: TRAILER from La ignorancia on Vimeo.

Actualmente Ana se encuentra frente al nuevo proyecto 'Pulsión', una pieza de danza, que ha iniciado su real andadura en el programa de residencia de la Nave del Duende. Lugar para desarrollar sus gustos coreográficos, sus gustos performáticos. Y mientras tanto da clases de danza contemporánea, imparte cursos de videodanza (Costa Contemporánea), baila para otras compañías, etc.

Y es que alegra ver una trayectoria joven y tan llena, pero aún alegra más pensar en lo que aún puede dar: tanto hecho y tanto por hacer, seguiremos la pista a esta incansable artista porque creo que seguirá dándonos momentos inolvidables de danza y cine.